Arte en España
Noticias de pintura, escultura, galerías de arte, teatro, danza, museos en España
El arte en España
Las primeras manifestaciones artísticas aparecen en el paleolítico superior, como las pinturas rupestres de la cueva de Altamira. La influencia de fenicios y griegos se manifestó en la orfebrería y la escultura en la zona del mediterráneo.
El arte romano influyó en toda la península ibérica, dejándonos grandes vestigios como las murallas de Lugo, los teatros de Sagunto y Mérida, el acueducto de Segovia, el anfiteatro de Tarragona, entre otros. El arte paleocristiano se inició en el siglo III y le siguió, a partir del siglo V, el arte visigodo. De estos períodos han quedado importantes restos, como la necrópolis constantiniana de Centcelles (Tarragona), la iglesia de San Juan de Baños (Palencia), los sarcófagos paleocristianos o la orfebrería visigoda. La influencia musulmana es la etapa que comprende del siglo VIII al XV. Destacamos la increible mezquita de Córdoba y la maravillosa Alhambra de Granada.
En el mismo periodo, en el norte de la península aparece el arte prerománico como Santa María del Naranco en Asturias . A partir del siglo XI domina totalmente en España el arte románico construyéndose monasterios y muchas iglesías sobre todo en la zona del Pirineo catalán. Seguidamente aparece el estilo gótico, que se extendió en Europa gracias a la orden del Císter y que en España posee importantes ejemplos, como los monasterios de Poblet y Santes Creus (Catalunya), y las catedrales de León, Burgos y Toledo. La pintura y la escultura alcanzaron un gran auge durante el gótico, destacando la monumentalidad de las portadas y los retablos pintados al temple.
Paralelamente al románico y al gótico se desarrolló un estilo artístico peculiar de España, el mudéjar, fusión entre estilos cristianos y musulmanes y que tiene sus mejores ejemplos en Toledo y Teruel.
Acabándose el siglo XV, comienza a dominar el arte renacentista, importado desde Italia. En arquitectura destaca el Palacio de Carlos V y el monasterio de El Escorial, en escultura son fundamentales las obras de Alonso Berruguete y Juan de Juni, y en pintura destaca El Greco.
El barroco se desarrolló en España durante el siglo XVII y la primera mitad del XVIII. En arquitectura se acentuó lo ornamental (catedral de Murcia, palacio del Marqués de Dos Aguas de Valencia); en escultura proliferó la imaginería religiosa, destacando las obras de Gregorio Fernández y Juan de Mesa; y en pintura se asistió al mejor período de la historia del arte en España, destacando autores como Ribera, Zurbarán, Murillo y, sobre todo, el maestro Diego Velázquez.
A mediados del siglo XVIII comienza a imponerse el neoclasicismo, patente en la arquitectura del Museo del Prado, la vuelta a los cánones clásicos en escultura, y una pintura dominada por la figura de Goya. En las artes llamadas menores se alcanzó un enorme auge gracias a la protección real, manifiesta en las Reales Fábricas como la de tapices, fundada por Felipe V, y la de porcelana del Buen Retiro, creada por Carlos III.
El romanticismo aparece en el siglo XIX, destacando el edificio de la Biblioteca Nacional y las pinturas de Mariano Fortuny.
El modernismo triunfó especialmente en Catalunya, siendo su mayor representante Gaudí, autor de la Sagrada Familia y la Casa Milà.
El siglo XX ha estado influido por diversos estilos: el contacto con el ambiente parisino de principios de siglo, el aislamiento internacional tras la guerra civil y la apertura a nuevas tendencias a partir de la década de los cincuenta. La pintura española del siglo XX alcanzó grandes cotas de reconocimiento internacional, gracias a las figuras de Pablo Picasso, Joan Miró y Salvador Dalí.