El Museo Reina Sofía presenta, a las 11:30horas del próximo jueves 11 de abril en el
Palacio de Velázquez.
Tetsuya Ishida. Autorretrato de otro.
Se trata de la primera gran antológica que se realiza en Europa sobre el trabajo de Tetsuya Ishida (Yaizu, Shizuoka, 1973 – Tokio, 2005), un artista de culto en su país que en su corta carrera reflejó los devastadores efectos de las grandes crisis económicas acaecidas a partir de 1973.
La muestra reúne un conjunto de 70 pinturas y dibujos que ponen rostro a la desolación
generalizada de una sociedad radicalmente afectada por los despidos masivos y la
especulación y que guarda muchos paralelismos con la crisis que desde 2008 afecta a la
economía y la política a escala mundial.
Sus obras son un testimonio excepcional de la alienación del sujeto contemporáneo a
través de un poderoso imaginario repleto de personajes híbridos y máquinas
antropomorfas que habla de la soledad, la incomunicación y la profunda crisis de identidad en un mundo al servicio de la producción y el consumo.
Biografía Tetsuya Ishida
Tetsuya Ishida nació en Yaizu, Shizuoka. Su padre era miembro del parlamento y su madre ama de casa. Se graduó de la Preparatoria Central de Yaizu en 1992. Ishida dijo en entrevistas que fue durante este período cuando sus padres y el director de la escuela lo presionaron para que prosperara académicamente y desarrollara una carrera como maestro o químico. Esta experiencia apareció más tarde en algunas de sus pinturas que exploran las expectativas de la sociedad de los jóvenes.
Ishida ingresó en la Universidad de Arte de Musashino donde se especializó en Diseño de Comunicación Visual. Se graduó en 1996. Los padres de Ishida, descontentos con su elección de carrera, se negaron a proporcionar apoyo financiero durante su período universitario. Ishida recordó esto con diversión en una entrevista.
Ishida y el director de cine Isamu Hirabayashi , un amigo de sus días universitarios, formaron una compañía multimedia para apoyar su trabajo juntos como colaboradores en proyectos de fusión de cine y arte. Enfrentando dificultades económicas durante la recesión de Japón en la década de 1990, su empresa conjunta cambió para convertirse en una empresa de diseño gráfico. Ishida dejó la compañía para desarrollar su propia carrera como solista.
De 1997 a 2005 ganó numerosos seguidores, numerosos premios y exposiciones, y elogios positivos de sus obras, que le permitieron trabajar a tiempo completo como artista hasta su muerte.
