Su obra se vende en Estados Unidos, pero en Rusia su nombre no es reconocido, solo lo recuerdan como escultor, y muchos piensan que ha emigrado, pero él sigue viviendo en su ciudad natal, San Petersburgo.
Obra de Georgy Kurasov
El foco en la figura humana, y una nueva interpretación del cubismo.
Kurasov es un artista contemporáneo. Dentro de las muy variadas formas artísticas actuales como el fotomontaje, las instalaciones artísticas, video-arte, o esculturas de variados materiales y formas, él es todavía un pintor, de la forma tradicional, pintura sobre lienzo.
Su obra demuestra su profundo conocimiento de la técnica y de la historia del arte de la pintura, y a su vez su obra es original.
Su individualidad se aprecia en sus diseños, composiciones y el particular uso del color, donde logra su propio estilo. En sus pinturas hay evocación de los mosaicos bizantinos, del renacimiento, y hasta de
Gustav Klimt y
Tamara De Lempicka.
Las formas triangulares, diferentes direcciones de la luz, colores brillantes en variaciones de intensidad y la estructura geométrica de las composiciones relacionan su obra con el constructivismo y el cubismo. Los accesorios y detalles no aparecen forzados, son aportes al ritmo de la obra y logran un efecto armónico. Sus personajes, aunque muy estilizados, son convincentes transmiten energía, seguridad y poseen cierta naturalidad, encajando con gracia y facilidad en una compleja estructura geométrica .
La figura humana es el foco de su interés artístico. Su forma de dibujar y lograr poses y expresiones es absolutamente particular, la geometrización de las formas no disminuye su elegancia ni su sensual atractivo.
Otra aspecto importante en su obra es la atención al detalle, herencia de la antigua tradición de la pintura renacentista. Con el cuidado y atención de un joyero ,
Kurasov trabaja en cada fragmento del cuadro hasta lograr el mayor efecto posible. Los elementos son enriquecidos con gradaciones de color, iluminación, matices y texturas.
Su obra se ha perfeccionado y refinado a través de los años, y es evidente se reflejan en ella los ambientes y costumbres de la vida moderna, y el diseño. La luminosidad, los planos, los colores brillantes, las superficies translúcidas, la elegancia que se representa en general produce un enorme atractivo visual.
Este mundo artificial ha nacido producto de su imaginación, y su brillante técnica, a permitido que su imaginario sea un resultado visible y disfrutable para el público, a través de sus obras.
Ver las pinturas de Georgy Kurasov es definitivamente una invitación a crear, en su dibujo crea juegos con las líneas acercándose a alguna forma de cubismo, su color es vivaz, impáctate e imponente, así como sus propuestas fisionómicas.